Desde el CEM enviamos nuestro más sincero pésame a la familia del pastor “Yen” y a toda la familia de iglesias Filadelfia, deseándoles el consuelo del Señor, sabiendo que “descansa de sus trabajos pero sus obras con él siguen” Apoc. 14:13. A continuación reproducimos íntegramente la noticia elaborada por nuestros compañeros de FEREDE a través de Actualidad Evangélica.
“El COVID-19 se ha cobrado una nueva víctima entre la comunidad evangélica en España. Esta mañana se confirmaba el fallecimiento del pastor gitano Enrique Blanco Jiménez, conocido popularmente como “el Yen”.
El pastor Blanco llevaba semanas luchando por su vida en la UCI de un hospital de Madrid y finalmente hoy, viernes 17 de abril, el Señor lo ha llamado a su presencia, a su descanso y gozo eterno.
Las expresiones de tristeza y de dolor por la partida de uno de los pastores de la Iglesia Evangélica Filadelfia más conocidos y queridos por el conjunto del pueblo evangélico español, se han hecho virales en las redes sociales desde las primeras horas de la mañana.
Desde la Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España (FEREDE) se ha lamentado su muerte a través de un comunicado, en el que se destaca el carácter integrador, su compromiso con la unidad de la Iglesia y la pasión evangelística que animaban su larga trayectoria ministerial.
El pastor Blanco comenzó su ministerio en el año 1975. Fue pastor de la iglesia evangélica de Orcasitas, en Madrid, durante 26 años. Fue responsable de la pastoral de Filadelfia en Madrid durante 6 años y responsable de los pastores de las islas Baleares durante 3 años.
En el corazón de Enrique Blanco anidaban tanto su vocación pastoral, con un cuidado paternal de fieles y pastores bajo su responsabilidad, como su profunda pasión por “alcanzar a los perdidos” con el mensaje transformador del evangelio de Jesucristo. Pasión que le llevó a participar en numerosos eventos de evangelización unida en colaboración con todas las iglesias evangélicas. Pasión que, ya fuera de nuestras fronteras, le impulsó a buscar a los gitanos por el mundo que no tenían a Cristo.
Con ese impulso llegó a la Argentina, donde estableció dos iglesias.
El último cargo que desempeñó fue el de Coordinador y misionero para la evangelización de la Iglesia Evangélica Filadelfia en América. Trabajó en México, Chile, Argentina, dejando en los corazones de cientos de personas su testimonio, sus enseñanzas, y una huella imborrable e imperecedera.
MEDALLA DE HONOR DEL CEM
En 2016 el pastor Enrique Blanco recibió la Medalla de Honor del Consejo Evangélico de Madrid (CEM), “en reconocimiento a su labor pastoral durante décadas en las congregaciones de etnia gitana, especialmente en el barrio madrileño de Orcasitas, donde desarrolló un trabajo de integración del pueblo gitano, así como de rehabilitación de jóvenes drogodependientes”. El galardón en esa ocasión fue recogido por su hijo, José Luis, ya que el pastor Enrique no pudo estar presente.
>> Puede leer aquí el comunicado de FEREDE
Madrid, 17 de abril de 2020.-
COMUNICADO
Asunto: Fallecimiento del pastor Enrique Blanco
En nombre de la Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España (FEREDE) queremos expresar nuestro profundo dolor y tristeza por la noticia conocida esta mañana del fallecimiento por causa del COVID-19 de nuestro querido hermano y amigo, el pastor de la Iglesia Evangélica Filadelfia, Enrique Blanco (conocido por todos como “El Yen”). Deseamos asimismo expresar nuestras más sentidas condolencias a su familia y allegados, así como a toda la gran familia de la Iglesia Evangélica Filadelfia.
El pastor Blanco era una persona respetada y especialmente querida dentro de la comunidad evangélica, reconocido como un hombre de fe y apreciado por su carácter optimista, su talante cordial, y su contrastada vocación de servicio al pueblo evangélico español, dentro y fuera de la comunidad gitana.
Como representante de la Iglesia Evangélica Filadelfia, el pastor Blanco trabajó incansablemente por el progreso espiritual, social y también institucional del pueblo gitano; por la unidad del pueblo evangélico en su conjunto; y por la evangelización de todos los españoles, sumándose con entusiasmo y activamente a cuanto esfuerzo, evento o campaña de evangelización unida se haya realizado en las últimas décadas en España.
Su muerte supone una pérdida inestimable para su familia, para sus hermanos, amigos y compañeros de ministerio, así como para el conjunto del pueblo evangélico, que hoy lloramos su ausencia. Las circunstancias de confinamiento por el COVID-19 en las que se produce su partida hacen que el dolor sea aún mayor al no poder despedirle como se merecería, y nos emplaza para honrar su memoria de forma pública más adelante, cuando las circunstancias lo permitan.
Pese a la profunda tristeza que hoy sentimos, quedará con nosotros el recuerdo grato de la sonrisa leal, siempre presente, de nuestro querido hermano, “El Yen”; la continuidad de su valioso legado; y la esperanza de un gozoso reencuentro en el Día de la Resurrección, cuando “el Señor mismo enjugará toda lágrima de nuestros ojos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor” (Ap. 21:4)”
Manel Rodríguez Mariano Blázquez
Presidente Secretario ejecutivo
Fuente: Actualidad Evangélica/ Redacción: Actualidad Evangélica/CEM
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